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Red Social Cristiana

Una Mujer....

Esta mujer ama al Señor de todo corazón y se dispone a diario a recibir amor por parte de El. Vive en su amor.

Sabe que es salva. Tiene el gozo de su salvación. Goza del perdón de todos sus pecados del pasado, y en el presente no deja que ningún pecado la separe de su gozo en el Señor.

Tiene la paz de Dios. Esta paz gobierna su mente y su corazón. Vive en paz y desprende paz. No tiene prisa, no esta de mal humor; hay armonía en si vida y los que se le acercan oyen las notas de la melodía que suena en su corazón.

Esta confiando en Dios en medio de sus problemas. Si no la conociésemos, pensaríamos que no tiene ninguno. Ha pasado el tiempo necesario con Dios en oración para descargarse y levantarse como nueva, sabiendo que Dios se encargara de sus asuntos y obrará.

Vive con los ojos puestos en Cristo. Esta centrada en El. Todo lo ve desde su punto de vista.

Tiene un espíritu de agradecimiento. Siempre esta dando gracias a Dios y a la gente por todo lo que recibe.

Vive perdonando. Ha perdonado de corazón a todos cuanto le hecho daño con un perdón rico, esplendido y generoso, y solo desea el bien para ellos.

Alaba y canta a Dios en su corazón. Le exalta y le tiene como un Dios grande y poderoso, para el cual no hay nada difícil.

Ha recibido palabra de Dios para el día. Se ha encontrado con El por la mañana. El ha hablado a su corazón y ella sabe lo que le ha dicho. Ha habido un intercambio real entre ella y su amado Padre.

Se valora como la preciosa hija de Dios que es. Esta maravillada con que Dios ha hecho en ella y espera aun más.

Sabe que es sierva de Dios y vive para servirle y para servir a los demás. El amor de Dios fluye de ella y a cada persona que ve la ama con el amor con que ha sido amada.

Su vida de fe y obediencia la ha llevado a una unión con el Espíritu de Dios. Hay una dulce armonía entre su espíritu y el de Dios que mora en ella.

¿Quien es esta increíble mujer?, ¡Eres tu ¡ y soy yo, siempre que estemos permaneciendo en la presencia del Señor. Entonces la transmitiremos a otros. Es la maravillosa obra que Dios esta haciendo en nuestras vidas, trasformándonos para que podamos ser canales de bendición para otras. No nos dejemos engañar por el maligno, que en seguida nos dice que esto es imposible, que no somos esta persona y que no vamos a serlo nunca. Es mentira por que la palabra de Dios nos dice “Para Dios somos olor de Cristo en lo que se salvan……. Olor de vida para vida “Y para estas cosas ¿quien es suficiente?”. Solo podemos decir que nuestra suficiencia viene de Dios.

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