Casado o no debes leer esto

[Diana Guerríos]

Cuando llegue a mi casa esa noche, mientras que mi esposa me servía la cena, le aguate su mano y le dije, tengo algo que decirte. Ella se sentó y comió callada la observe y vi el dolor en sus ojos, de pronto no sabía cómo abrir mi boca, pero tenía que decirle lo que estaba pensando “quiero el divorcio” ella no parecía estar disgustada por mis palabras y me pregunto suavemente, porque? Me dijo tú no eres un hombre!! Esa noche no hablamos, ella lloraba, yo sabía que ella quería saber que estaba pasando con nuestro matrimonio, pero no pude contestarle. Sucedió que ella había perdido mi corazón a otra mujer llamada Juana, ya yo no amaba a mi esposa, solamente le tenía lástima!  Con un gran sentido de culpabilidad, escribí un acuerdo de divorcio y en este acuerdo ella se quedaba con la casa, carro, y el 30% de nuestro negocio. Ella miro el acuerdo y lo rompió en pedazo, ella paso 10 años de su vida conmigo y éramos extraños, yo le tenis lastima,  por todo su tiempo perdido, su energía pero ya no podía cambiar, yo amaba a Juana. De pronto  empezó a gritar y a llorar como para desahogarse, la idea del divorcio ahora  era más clara para mí, el próximo día llegue a casa y la encontré escribiendo en la mesa, no cene y me fui a dormir estaba muy cansado de haber pasado el día con Juana.  Cuando desperté todavía estaba mi esposa escribiendo en la mesa, no me importo me vire y seguí durmiendo, por la mañana mi esposa me presento sus condiciones para el divorcio, no quería nada de mi pero necesitaba un mes de aviso antes del divorcio. Me pedía en el divorcio que por un mes tendríamos que vivir como si nada y llevarnos norma, sus razones eran simples, nuestros hijos tenían todo ese mes pasaba los exámenes  y no quería molestarlos con nuestro  problema de matrimonio quebrantado yo estuve de acuerdo, pero ella tenía otra petición que me acordara cuando yo la cargaba a nuestro cuarto el día que nos casamos. Me pidió que por ese mes todos los días la cargara del cuarto hasta la puerta de salida de la casa, pensé que se estaba volviendo loca, pero para que la fiesta fuera en paz lo acepte, le conté a Juana lo que mi esposa me pidió y Juana se reía en vos alta y dijo que era absurdo esa petición, que no importaba que truco mi esposa usara, tendría que darle la cara al divorcio. Mi esposa y yo no teníamos contacto físico desde que exprese mis intenciones de divorcio, así que cuando la cargue el primer día hasta la puerta del frente, los dos nos sentimos mal, nuestros hijos caminaban aplaudiéndonos y diciendo, papá está cargando a mi mami en tus brazos, sus palabras me dio mucho dolor. Camine los 10 metros con mi esposa en mis brazos, ella serró los ojos y me dijo en voz baja, no le digas a nuestros hijos del divorcio, le señale con la cabeza un poco disgustado, la baje cuando llegue a la puerta se fue a esperar la transportación para ir a trabajo, yo maneje solo al trabajo. El segundo día los dos estábamos más relajados, ella se apoyo a mi pecho y pude sentir su fragancia de su blusa,  me di cuenta que hacía tiempo que no la  miraba detenidamente, me di cuenta que ya  no era tan joven, tenias algunas arrugas, canas, era notable el daño de nuestro matrimonio, por un momento pensé y me pregunte, que fue lo que le hice? El cuarto día la cargue, sentí que la intimidad estaba regresando entre ambos, esta era la mujer que me dio 10 años de su vida. En el quinto y sexto día, seguía creciendo nuestra intimidad. No le dije nada a Juana al respeto, cada día era más fácil cargar a mi esposa y el mes se iba corriendo, pensé que me estaba acostumbrando a cargarla y por eso era menos notable cargar el peso de su cuerpo. Una mañana ella estaba mirando que ponerse, se había probado muchos vestidos pero no le servían, quejándose dijo! Mis vestidos se han puesto grande y  fue allí que me di cuenta que estaba muy delgada, y esa era la razón por cual yo no sentía su peso al cargarla. De pronto me di cuenta que se había enterrado mucho dolor y amargura, si darme cuenta le toque sus cabellos, nuestros hijos entraron al cuarto y dijeron papá llego el momento de que cargue a mamá hasta la puerta. Para mis hijos ver a su padre día tras día cargar a su mamá hasta la puerta, se había convertido en una parte esencial de su vida, mi esposa me abrazo, yo vire mi cara sentí temor que cambiara su forma de pensar sobre el divorcio, ya cargaba a mi esposa en mis brazos hasta la puerta, se sentía igual que el primer día de nuestra boda. Ella acariciaba mi cuello suavemente y natural, yo la abrasaba fuertemente igual que nuestra noche de boda, la abrase y no me moví, pero la sentí tan livianita y delgada que me dio tristeza, el ultimo día igual la abrase y quería moverme, le dije no me di cuenta que ya no teníamos intimidad, mis hijos estaba para irse a la escuela, maneje para la oficina salí del carro sin cerrar la puerta, subí las escaleras  y Juana me abrió la puerta y le dije, discúlpame lo siento no quiero divorciarme de mi esposa. Juana me miro, me pregunto si yo tenía fiebre? Y yo le conteste mi esposa y yo nos amamos, era que estábamos en rutina y estábamos aburridos, no valoramos los detalles de nuestras vidas desde que empecé a cargarla del cuarto a la puerta. Me di cuenta que debo cargarla por el resto de nuestras vidas, hasta que la muerte nos separe, Juana empezó a llorar me dio una bofetada y tiro la puerta, baje las escaleras me monte en el auto y llegue a la floristería  y le compre flores a mi esposa. La joven en la floristería me pregunto, que le escribo en la tarjeta? Y le dije que le escribiera, te cargare todas las mañanas hasta que la muerte nos separe! Llegue a mi casa con flores en las manos y una sonrisa, corrí y subí las escaleras  entre y encontré a mi esposa muerta. Mi esposa estaba batallando la enfermedad de cáncer y yo estaba tan ocupado con Juana, que no me di cuenta, mi esposa sabía que estaba muriendo y guardo silencio, por esa razón ella me pidió un mes de aviso antes del divorcio, para que nuestros hijos no le quedara un mal recuerdo de nuestro divorcio, para que no estuvieran una reacción negativa, por lo menos le quedaría a nuestros hijos en sus ojos que su padre era un esposo que amaba a su esposa. Estos pequeños detalles es lo que importa en una relación, no la casa, carro,  o dinero en el banco,  crea un ambiente que crees que te llevaría a la felicidad, pero en realidad no es así trata de mantener su matrimonio feliz, comparte esta historia con tus familiares, amigos  quizás estés salvando un matrimonio, todas las historia de fracasos son iguales. Se dan por vencidos cuando están a punto de entrar en éxito, no sabemos lo que tenemos hasta que lo perdemos,  Mateo 19:5 y dijo por esto el hombre dejara padre y madre y se unirá a su mujer, y los dos serán una sola carne.  Mateo 19:6 Así que no son ya más dos, sino una sola carne, por tanto, lo que Dios juntó, no lo separe el hombre. Dios les bendiga♥♥♥♥♥♥

[Diana Guerríos]

Gracias a usted amada Yzolay eso es asi Dios te bendiga siempre saludos linda...

[Yzolay]

     Me llegó al corazón... Dios te bendiga mi hermanita, la verdad aveces perdemos el tiempo en cosas tontas y no aprovechamos lo bonito de la vida...

     Que Él Señor te siga utilizando para darle esas reflexiones a otros. Gracias :)