EL SENOR ORGULLO

[EDWIN KAKO VAZQUEZ]

Como todos los días daba mi caminata por la vida, observando cada minucioso detalle y la razón de vivir. Justamente pasaba por una esquina y observe a un grupo reunido que hablaban entre sí. Pude observar a la arrogancia, la presunción, el engreimiento, la autosatisfacción, la vanagloria y altivez recibiendo órdenes de parte del maligno. De pronto llego a la equina una limosina muy grande de donde salió el orgullo vestido de rebelión y desobediente como siempre. Llegue hasta el grupo y le pregunte al orgullo si podía hablar con él, me miro de arriba abajo con altivez y me dijo, que quiere le diga. Le comente que me gustaría saber por qué el siempre actúa de esa manera. Me miro de reojo y me dijo: “Soy prepotente, ego centrista y no tengo humildad, me encanta ser de esta manera. Históricamente he arruinado la vida de muchos seres humanos llevándolos a la desobediencia y a la rebelión. Soy una raíz venenosa en el alma que me manifiesto en todo tipo de pecado.  Me gusta ir en contra de la voluntad de Dios, nunca pido perdón, no doy mi brazo a torcer, siempre me gusta tener la razón, desprecio, no admito mi condición pecaminosa, acuso despiadadamente cuando puedo y soy el mejor de todos. Allí parado seguía escuchando a este señor hablar sin mediar ninguna palabra, llego mi momento de hablar y le dije: “Sabes que, te defino como una confianza excesiva de ti mismo, de logros, estado, pertenencia y posición”.  Eres una rebelión porque te atribuyes el honor y la gloria que pertenece solo a Dios. Las personas como tú no creen que es necesario pedir perdón por qué no admiten su condición pecaminosa. Tu actitud hacia los demás tiene poca apreciación, te burlas y tratas a las personas con deprecio y crueldad. Antes de irme quiero que sepas que eres la raíz y la esencia del pecado, eres un ente deplorable, espero que algún día te encuentres con la humildad para que aprendas de ella y te sometas a Dios. AMEN