Usted No Tiene Que Aguantar Más
"El pecado no se enseñoreará de vosotros". (Rom. 6:14)
No creo que pueda haber una mayor angustia de conocer a Jesús y aún así ser un esclavo del pecado. Es de conocimiento común que hay muchos practicantes secretamente adictos a la pornografía, el alcohol, las drogas y otros pecados. Ellos no quieren que ser así, pero no saben cómo superar su esclavitud a la injusticia y su corazón doler debido a la oscuridad que se oculta en su interior. Ellos sienten una gran vergüenza, pero puso caras felices. Sólo ellos, y Dios, conoce la vergüenza terrible que es profundo dentro de sus almas. Ellos quieren cambiar, pero siguen siendo como son, porque nadie les ha dicho que no tiene que aguantar más, es decir, que no tienen que tomar el pecado más. Jesús vino a liberar a los cautivos, para que nadie tenga que seguir siendo un esclavo del pecado. En Juan 8:34, Jesús dijo: "Les aseguro que todo el que peca es esclavo del pecado", pero él continuó diciendo, "si el Hijo los libera, serán ustedes verdaderamente libres" (Juan 8 : 36). Por lo tanto, si usted está luchando con los gustos de la pornografía, el alcohol o las drogas, entonces también puede ser liberado y entrar en la maravillosa paz de Dios que viene cuando la oscuridad interior es reemplazado por la luz. ¿Cómo se hace esto?
En primer lugar, echemos un vistazo a nuestra naturaleza pecaminosa
No hay duda de que vamos a ser influenciados por nuestra naturaleza pecaminosa hasta que veamos a Jesús, pero esto no quiere decir que tengamos que ceder a ella. Mucha gente dice que somos humanos y no pueden ser libres de la esclavitud del pecado a pesar del hecho de que Jesús dice que podemos ser. Una vez escuché lo siguiente: "Tenemos un cuerpo que tiene hambre, así que comer, un cuerpo que tiene sed, así que beber y una naturaleza pecaminosa por lo que siempre será pecado." Esta es una terrible mentira que deja a muchas almas cargadas con la culpa de su pecado. Jesús dice claramente que Él puede liberarnos. En Rom. 7:24-25, Pablo admitió abiertamente a la maldad de su carne, cuando dijo: "¡Qué desgraciado soy!" PERO él pasó a decir: "¿Quién me librará de este cuerpo de muerte gracias sean dadas a Dios -! Por medio de Jesucristo nuestro Señor" Claramente, Pablo nos dice que a través de Jesús, él se cambió y rescatado de su cuerpo carnoso de la muerte. En Rom. 6:14, dijo, "el pecado no se enseñoreará de vosotros", y esto se hace posible a través del Espíritu Santo.
El Espíritu Santo nos da el poder para vencer el pecado
Dios sabe muy bien lo débiles que somos por lo que cuando nos arrepentimos y aceptamos a Jesús Él envía el Espíritu Santo para vivir dentro de nosotros para guiarnos y darnos poder para vencer nuestras pasiones. Por medio del Espíritu, podemos ser liberados de nuestra naturaleza pecaminosa como Gal. 5:16 claramente dice: "Andad en el Espíritu, y no satisfagáis los deseos de la naturaleza pecaminosa." Esto no es un cuento de hadas, es la Palabra de Dios y millones de cristianos, pasado y presente, puede dar fe de haber sido rescatados de lo peor de los pecados. La Biblia dice que Dios no tiene favoritos por lo que si usted no ha sido rescatada de su cuerpo a la muerte, entonces puedes estar seguro de que Dios está esperando para entregar también. Dios nos ha dado la capacidad y la responsabilidad de vivir una vida santa.
Capacidad y la responsabilidad
En primer lugar, en cuanto a nuestra capacidad, la razón que Dios envía al Espíritu Santo para vivir dentro de nosotros es transformar nuestras vidas para que podamos vivir una vida que le agrada. Hablando acerca del Espíritu, 2 Ped. 1:3-4 dice: "Su divino poder [el Espíritu Santo] nos ha dado todo lo que necesitamos para vivir como Dios manda [de modo que] usted puede participar en la naturaleza divina, habiendo huido de la corrupción en el mundo a causa de la concupiscencia". De estos versículos podemos ver que el poder divino del Espíritu nos da la posibilidad de escapar de la corrupción del pecado y vivir una vida agradable a Dios (ver Ez. 36:25-27 también).
A continuación, en cuanto a nuestra responsabilidad, se nos manda a "vivir por el Espíritu." Hacemos esto mediante el arrepentimiento con todo nuestro corazón, alma, mente y fuerza cada vez que el Espíritu nos convence de pecado. Si, por ejemplo, la pornografía es un problema para ti, entonces la próxima vez que lo desea, luchar contra ella con todas tus fuerzas y pedirle a Dios que te esfuerzo de resistir. Usted puede estar seguro de que Dios te ama tanto como ama a cualquier otra persona y fortalecerá a superar cuando se está verdaderamente arrepentido. Si el arrepentimiento es a medias entonces Dios no os libraré, porque él ve que usted ama su pecado más que su justicia. Tienes que llegar al punto en el que odia su pecado tanto como él lo hace. Al llegar a ese punto, y clamar a Él en arrepentimiento, Él te librará y cambiar su actitud de corazón hacia ese pecado para que pueda resistir la tentación cuando en el futuro. Cuando la tentación viene de nuevo, y lo hará, usted tiene que mantenerse firme y no ceder a ella en lo más mínimo lo contrario se le enganchó de nuevo y tener que empezar de nuevo. Santiago 4:7 dice: "Someteos, pues, a Dios. Resistan al diablo, y huirá de vosotros." Dios no reside creer esto con todo tu corazón, resistir el pecado con todas tus fuerzas, y usted liberado.
La pornografía, el alcohol y las drogas no son los únicos pecados adictivos. En cierto sentido, todos los pecados son adictivos. Muchos feligreses son adictos a los chismes, el odio, los celos, etc, y estos pecados hay que arrepentirse de la misma manera como la pornografía, el alcohol y las drogas. Galón 5:19:21 listas de muchos otros pecados que excluyen a la gente del reino de Dios.
Finalmente
Usted no tiene que aguantar más. Jesús le ofrece la libertad de la carga del pecado. No creas la mentira de que el pensamiento tiene muchos "Así soy yo. Soy un ser humano." Si está atrapado en el pecado entonces le insto a aceptar la invitación amorosa de Jesús: "Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que yo. soy manso y humilde de corazón, y hallaréis descanso para vuestras almas. Porque mi yugo es suave y mi carga es liviana "(Mateo 11:28-30).
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Mick Alexander
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