Hola Cristo te ama, no conozco tu dificultad pero Dios si la conoce, para la honra y gloria de Dios lo que te voy a decir, testificar es real, es mi testimonio; yo fui sanada de cáncer en el cerebro.
La mitad del cuerpo se podía quedar paralizado, no iva poder hablar, me podía quedar ciega, la cara se iva a poner morada, hinchada por lo delicado de la operación. Pero para la honra y gloria de Dios estoy sana, cumplí el 14/Sept./08 20 años de la operación por la misericordia de Dios. Me mandaban a morir a morir pero estoy aquí proclamando y glorifican-do El nombre glorioso de Dios; el tumor que sacaron del cerebro el 14/Sept./88 en la operación ocupó un vaso de tomar café, resultó maligno tenía cáncer; pero estoy sana para la gloria, la honra, Amor, y misericordia solo de Dios.
Me mandaban los médicos a morir a mi país; pero Dios es él que tiene la última palabra y hace completa su obra.
El último cartucho que podían utilizar dijeron los médicos era Radiación, recibí 50 terapias, 6 semanas de radiación después de la operación. Se veían a las personas que se retiraban porque los estragos que tenían eran demaciado fuertes por la radiación que recibían.
Para la gloria, la honra, amor, y misericordia de Dios incomparables no tuve ningún estrago, estoy totalmente Sana.
Dios todo lo puede, para Él nada es imposible, Él es el dueño y Señor de todo lo creado el que abre y cierra puertas, nuestro Proveedor.
En 1997 Dios abrió las puertas nuevamente, y me probeyó todo lo que necesité como lo hizo en el año 1988 cuando me operaron del tumor en el cerebro, y después la terapias de radiación que recibí. Dios probeyó, suplio para todas mis necesidades; lo espiritual, la sanidad de mi cuerpo, lo económico, hospital, etc. todo por su Gran Amor y Misericordia.
Fue así que en Diciembre del 1997 viaje nuevamente a los Estados Unidos de América. El motivo: Comenzó a drenar líquido del cerebro por la nariz como si era una gripe. Los médicos dijeron que tenían que poner una bálbula interna para que drenara el líquido internamente; pero no querían operarme aquí en Ecuador. Cuando llegue a los Estados Unidos el médico neurocirujano que me operó en 1988 me había borrado de la lista de sus pacientes, pues creía que había fallecido; cuando me vio me reconoció, se alegró. Dios abrio las puertas nuevamente y el Dr. Alfredo Prada me operó nuevamente, puso la bálbula; mi cerebro está sano totalmente, nitido, sin rastro del cáncer para la gloria, honra, alabanza, y Amor de Dios.
Dependo sólo de Él, del Dios Todopoderoso, sin Él nada soy y todo lo que tengo es solo por Él.
Lo que Dios hizo en mí un día lo puede hacer en tí ahora Él conoce tu corazón, conoce tu dificultad búscalo. Yo lo recibí al Señor Jesucristo como mi Señor y Salvador el 13/Agosto/88 un mes antes de la operación. El me dió esa Paz que el mundo no te puede dar. Dios conoce tu condición, situación, tu dificultad a El nada le puedes ocultar, así como obró, me sanó, me salvó un día a mí puede acerlo contigo ahora. Este es el tiempo y la hora no mires atras, recibe a Jesucristo como el Señor y Salvador de tu vida en este momento, El es tu sanador y libertador, gracias por permitirme participar de este testimonio, que exalta la grandeza de nuestro DIOS RHAFA..(JEHOVA SANADOR)